Examinando por Materia "Pandemia de COVID-19, 2020-."
Mostrando 1 - 11 de 11
Resultados por página
Opciones de ordenación
Publicación Acceso abierto Aspectos clínicos y tratamiento de la infección por SARS-CoV-2(Universidad de Córdoba., 2023) Berrocal, José; Carreño, Teresa; Arosemena, Alejandra; Mattar, SalimEl 31 de diciembre de 2019 las autoridades sanitarias de Wuhan — provincia de Hubei, China— informaron sobre un conjunto de 27 casos con neumonía de etiología desconocida. Al parecer el inicio de los síntomas del primer caso había sido el 8 de diciembre de 2019. El 7 de enero de 2020, las autoridades chinas confirmaron, mediante métodos moleculares, el agente causante de ese brote: un nuevo tipo de virus de la familia Coronaviridae y que fue secuenciado en tiempo récord y se denominó SARS-CoV-2 (1). Su nombre se debió a que en 2001 emergió el primer coronavirus respiratorio SARS. En 2012 emergió en el medio oriente otro coronavirus llamado MERS (Middle East Respiratory Syndrome) que causo enfermedades respiratorias similares al SARS.Publicación Acceso abierto Epidemiología de la pandemia por COVID-19(Universidad de Córdoba., 2023) Contreras, Verónica; Sánchez Lerma, Liliana; Gastelbondo-Pastrana, Bertha; Rivero Herrera, Ricardo; Máttar, SalimA mediados de diciembre del 2019, fueron reportados varios casos de neumonía viral por un agente desconocido en Wuhan, China; tenían en común la exposición en un mercado de mariscos y animales silvestres, sugiriendo un potencial origen zoonótico (1). El 31 de diciembre de 2019 la OMS (Organización Mundial de la Salud) alertó sobre la emergencia y el 7 de enero de 2020 se reportó que el agente causal era una nueva especie de coronavirus SARS, detectado en un paciente (2). A nivel mundial se generó impacto y desconcierto debido a epidemias previas de SARS (2003) y MERS (2012). A finales de enero de 2020, 11791 casos y 213 muertes fueron reportados en más de 19 países. En febrero de 2020 se declaró emergencia de Salud Pública de Preocupación Internacional (3). En marzo de 2020, 413.467 casos y 18.433 muertes habían sido reportados a nivel mundial y se declaró oficialmente la pandemia global por COVID-19 (5), momento en el cual la mayoría de países comenzaron a implementar medidas restrictivas para detener el progreso de la pandemia.Publicación Acceso abierto Generación de nuevo conocimiento durante la pandemia: un aporte del Instituto de Investigaciones Biológicas del Trópico (IIBT)(Universidad de Córdoba., 2023) Mattar, Salim; Gastelbondo-Pastrana, BerthaEl IIBT tiene dos décadas investigando las enfermedades emergentes y reemergentes. El instituto ha contribuido con el conocimiento sobre los síndromes febriles relacionados con las ETVs en humanos. Dentro de su trayectoria ha investigado sobre fiebres hemorrágicas vectores importantes en salud pública como: roedores, garrapatas, mosquitos y murciélagos.Publicación Acceso abierto Importancia de la bioseguridad en el contexto de la pandemia por SARSCov-2(Universidad de Córdoba., 2023) Bonfante, Andrés; Mendoza, Luisa; Tique Salleg, Vaneza Paulin; Miranda, Jorge; Herrera, Yonairo; Contreras, Verónica; Llorente, Iván; Arrieta, Germán; Brango, Eimi; Mattar, SalimDe acuerdo con la organización mundial de salud (OMS), la bioseguridad es un conjunto de principios, técnicas y prácticas aplicadas con el fin de evitar la exposición no intencional a patógenos y toxinas, o su liberación accidental. Estas medidas tienen como fin disminuir todo tipo de probabilidad de exposición a riesgos biológicos, físicos y químicos.Publicación Acceso abierto Inmunopatogénesis de la Infección por SARS-CoV-2(Universidad de Córdoba., 2023) Serrano-Coll, Héctor; Rivero Herrera, RicardoLa respuesta inmunológica clásicamente se ha descrito como un conjunto de tejidos y componentes celulares de Tipo innato y adaptativo que tienen la capacidad de reconocer y actuar frente a antígenos extraños. En el caso del SARS-CoV-2, esta infección podría activar patrones inmunológicos en el hospedero que estarían ligados con la mitigación o con la progresión de esta enfermedad (1). Por lo tanto, el entendimiento de estos mecanismos inmunes sería clave para conocer cuál sería su efecto en el desenlace clínico de los infectados con SARS-CoV-2 y en el desarrollo de nuevos fármacos contra este nuevo virus. No obstante, el objetivo de este capítulo es discutir los mecanismos innatos y adaptativos que están relacionados con la mitigación o progresión del COVID-19.Publicación Acceso abierto Lecciones aprendidas del COVID-19: Una mirada interdisciplinaria(Universidad de Córdoba.)En diciembre de 2019, China reconoció una serie de casos de infecciones respiratorias agudas. En enero de 2020, el virus se había propagado a otros países de Asia, y en febrero de ese año, la Organización Mundial de la Salud declaró la alerta sobre una posible pandemia. El 24 de marzo, Colombia declaró el cierre de sus fronteras y comenzó un confinamiento de 4 meses con el objetivo de contener la propagación del SARS-CoV-2. No obstante, al igual que en otros países, el virus se propagó y causó millones de infecciones y muertes. La comunidad médica recordaba la gripe española de la década de 1920, pero no sabía cómo tratar a tantos enfermos. Las medidas de bioseguridad se extremaron como la única opción para contener la avalancha de casos y el colapso de los hospitales y las unidades de cuidados intensivos. Algunos, de forma errónea, se aferraron a fármacos antiparasitarios y antibacterianos para curar un virus. En abril de 2020, en un intento por agilizar y otorgar diagnósticos oportunos de COVID-19, el Instituto Nacional de Salud avaló los laboratorios de las universidades con infraestructura y experiencia en técnicas moleculares. Esto permitió al país contar simultáneamente con cientos de laboratorios públicos y privados que diagnosticaban miles de casos diarios del nuevo coronavirus. Por otro lado, la búsqueda para identificar el vector, los reservorios y los huéspedes accidentales del SARS-CoV-2 demostró que los animales domésticos como perros, gatos y animales en cautiverio en los zoológicos podían padecer la enfermedad del COVID-19. Lo más preocupante era que los virus mutaban en esos animales, lo que indicaba la posibilidad de un salto interespecies de los virus con cambios preocupantes en su genoma que podrían volverse más virulentos. Paralelamente, se declaró la emergencia para agilizar los estudios preclínicos y clínicos de las nuevas vacunas contra el SARS-CoV-2 y, en diciembre de 2021, se otorgaron licencias para las vacunas de ARN mensajero, seguidas de vacunas inactivadas químicamente y otras plataformas. Mientras ocurrían las olas o picos epidemiológicos, el virus mutaba y aparecían las variantes, y la población adulta sana adquiría inmunidad natural. En febrero de 2022, se empezaron a aplicar las primeras dosis de la vacuna al personal sanitario y a los adultos mayores. A finales de 2022, a pesar de estar vacunados, se reportaron casos de reinfecciones. En 2023, apareció la variante ómicron y sus subvariantes, que en este momento predominan en el hemisferio norte. Estas nuevas subvariantes evaden la respuesta inmune de los vacunados y de los infectados naturalmente; sin embargo, no parecen ser más agresivas que la cepa ancestral de Wuhan, posiblemente porque de alguna manera tanto la infección natural como la heteróloga están protegiendo a la población. Actualmente, el país ha experimentado una disminución de casos y la mortalidad ha caído a niveles bajos, habiendo alcanzado una cobertura de vacunación del 70% con dos dosis. No obstante, desde el punto de vista epidemiológico, y a pesar del esfuerzo del personal sanitario, Colombia ocupó el quinto puesto de los 13 países de América del Sur con mayor mortalidad. A nivel global, de 231 países, Colombia quedó en el primer cuartil de mortalidad en el puesto 31.Publicación Acceso abierto Material particulado, ¿un vehículo transmisor para el SARS-CoV-2?(Universidad de Córdoba., 2023) Marrugo-Negrete, José; Paternina-Uribe, Roberth; Rosso Pinto, Mauricio Jose; Negrete, Ivonne; Mendoza, María; calao ramos, clelia rosa; López, Luz; Cepeda, Nazly; Arriola-Salgado, María; Mattar, SalimLa contaminación atmosférica se define como la presencia de sustancias en el aire provenientes de procesos naturales (por ejemplo, la erupción de volcanes) o antropogénicos (quema de combustibles fósiles), en concentraciones que puedan generar un riesgo para la salud y el bienestar de las personas, los animales y el medio ambiente (1). La estrecha relación existente entre la contaminación atmosférica y las afectaciones a la salud humana ha sido documentada en varios estudios científicos (2,3).Publicación Acceso abierto Resultados del aprendizaje del IIBT durante la pandemia: detección molécular de SARS-CoV-2(Universidad de Córdoba., 2023) Contreras, Hector; Gastelbondo-Pastrana, Bertha; Torres, Karina; Contreras, Verónica; Echeverri De la Hoz, Daniel Mauricio; Flórez, Luis; Garay, Evelin; Mattar, SalimEl Instituto de Investigaciones Biológicas Del Trópico (IIBT), es reconocido como instituto de investigación, desarrollo e innovación, por los entes gubernamentales En la emergencia sanitaria el IIBT por su vasta experiencia de mas de 20 años en enfermedades emergentes, no vacilo en dar un paso adelante y contribuir al control de la pandemia en su área de influencia. El IIBT, fue uno de los primeros laboratorios del país, que por su infraestructura y personal capacitado fue habilitado para el diagnóstico, oportuno y confiable de los pacientes infectados. Gracias a la experiencia condistintos patógenos virales y bacterianos, el IIBT aportó su conocimiento, experiencia y preparación para afrontar el diagnóstico de SARS-CoV-2 desde abril de 2020.Publicación Acceso abierto Riesgo zoonótico por Coronavirus(Universidad de Córdoba., 2023) Martínez, Caty; Botero, Yésica; López, Yésica; Lozano, Monica; Alemán, Ader; Guzmán, Camilo; Calderón, AlfonsoSe estima que entre el 60 y el 75% de las enfermedades infecciosas emergentes están compuestas por enfermedades zoonóticas; de estos, más del 70% se han originado en especies de vida silvestre (1). Los coronavirus (CoV), son considerados patógenos emergentes, causantes de infecciones en animales y humanos, están asociados a síndromes intestinales, respiratorios y neurológicos de gravedad variable (2)occasionally centred on degenerated neutrophils and surrounded by a broad rim of plasma cells, features consistent with pyogranulomatous meningitis. The histopathological features in this ferret were similar to those in cats with feline infectious peritonitis. Definitive diagnosis was assessed by immunohistochemistry, confirming a ferret systemic coronavirus (FSCV. La familia Coronaviridae tiene cuatro géneros Gamma-coronavirus (γCoV) y Delta-coronavirus (δCoV), los cuales causan enfermedades en las aves, Alfa-coronavirus (αCoV) y Beta-coronavirus (βCoV), se encuentran principalmente en mamíferos como murciélagos, roedores, civetas, cerdos, caballos, ganado vacuno y seres humanos. Los virus que han causado alertas en las poblaciones humanas SARS-CoV-2, SARS-CoV y MERS-CoV hacen parte del linaje βCoV (1). Esta familia viral muestra un marcado tropismo por las células epiteliales de los tractos respiratorio y entérico. Por lo general, tienen un rango de huéspedes restringido, infectando a su huésped natural y especies animales estrechamente relacionadas, sin embargo, tienen la capacidad de cruzar la barrera de especies (3). Los coronavirus en los humanos se consideraron altamente patógenos en 2002 cuando se reportó la epidemia por síndrome respiratorio agudo severo (SARS-CoV-1) en China (4), y diez años después el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS-CoV) que se originó en los países de Oriente Medio.Publicación Acceso abierto SARS-CoV-2 y la vacunación: situación actual y futuros escenarios(Universidad de Córdoba., 2023) Echeverri De la Hoz, Daniel Mauricio; García, Alejandra; Máttar, SalimDesde el surgimiento de las enfermedades infecciosas, la inmunización se convirtió en la principal estrategia de mitigación y erradicación de microorganismos patógenos. La vacuna de la viruela se convirtió en la primera herramienta “biotecnológica” que permitió a la humanidad, en tiempos sin desarrollo molecular, detener enfermedades de importancia médica. El inicio de las vacunas comenzó en 1796, cuando Edward Jenner observó que algunas mujeres que ordeñaban vacas no presentaban la infección de viruela bovina. Jenner tomó raspados de la lesión de una vaca con viruela y las inoculó en el brazo del niño James Phipps, el cual sobrevivió y no padeció la enfermedad. En ese momento nació la inmunización, que posteriormente se llamó “vacuna” por su origen en las vacas. La siguiente vacuna apareció un siglo después con Louis Pasteur, quien descubrió el concepto de los microorganismos atenuados y en 1885 aplicó una vacuna atenuada del virus de la rabia para evitar la enfermedad en el niño Joseph Meister el cual había sido mordido por un perro con rabia (1). Con estas bases, en el siglo XX con una ciencia apoyada en la biotecnología, se diseñaron diversas vacunas contra algunas enfermedades en las que se encuentra el polio, tuberculosis, sarampión, tetanus, difteria, meningitis, fiebre amarilla, hepatitis (A y B), varicela, neumococo, entre otras (Figura 1). Como resultado, la vacunación se convirtió en una de las intervenciones en salud publica más importantes en el mundo moderno, disminuyendo así los casos de infección grave; y en otros casos, la erradicación de enfermedades como ocurrió con la viruela en 1980.Publicación Acceso abierto Tecnologías diagnósticas para la detección de SARS-CoV-2(Universidad de Córdoba., 2023) Gastelbondo-Pastrana, Bertha; Contreras, Hector; Torres, Karina; Arosemena, Alejandra; Echeverri De la Hoz, Daniel Mauricio; Garay, Evelin; Paternina, Esteban; Flórez, Luis; Arrieta, Germán; Brango, Eimi; Guzmán, CamiloLa pandemia por COVID-19 se ha manifestado como un desafío para los gobiernos de todo el mundo debido a la transmisibilidad del virus, su impacto en los sistemas de salud, la economía y la sociedad (1). Esta enfermedad reveló la inminente necesidad de realizar diagnósticos a gran escala en periodos de tiempo relativamente cortos, basados en aspectos clínicos y en pruebas de laboratorio (2). Sin embargo, la sintomatología en algunos pacientes infectados se caracterizó por ser altamente atípica y en otros casos, suele presentar de manera asintomática; por esta razón, las técnicas basadas en biología molecular e inmunología se convirtieron en herramientas indispensables para la detección y estudio de la COVID-19 (3).